Caja Rural de Canarias aprueba su incorporación al Grupo Cooperativo Cajamar

LAS PALMAS.- La asamblea general extraordinaria de Caja Rural de Canarias ha aprobado esta noche su incorporación al Sistema Institucional de Protección (SIP) liderado por Cajamar.

   De esta manera, queda revalidada la propuesta presentada por el Consejo Rector, que fue adoptado por 2.897 votos a favor, 40 en contra y 36 abstenciones.

   La decisión de la asamblea general de Caja Rural de Canarias será notificada ya este viernes por la mañana por Cajamar como hecho relevante a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), según confirmaron fuentes conocedoras del proceso.

   Caja Rural de Canarias se convierte así en la séptima entidad que aprueba su incorporación al Grupo Cooperativo Cajamar, al que aporta un volumen de negocio de 2.214 millones de euros, activos por importe de 1.264 millones de euros, 69 oficinas, 322 empleados y más de 100.000 clientes.

   La Rural de Canarias, con sede en Gran Canaria, cuenta con más de 23.000 socios, de los que 18.697 son personas físicas y 4.349 empresas e instituciones.

   Integrado por Cajamar Caja Rural, Caja Rural de Casinos, Caixa Albalat, Caixapetrer, Caixa Turís, Caja Rural Castellón y unos meses después de que Caja Rural de Baleares y Caja Campo hayan completado también su fusión con la entidad cabecera, el Grupo Cooperativo Cajamar es el primer grupo consolidable de cooperativas de crédito de España.

   De este modo, el nuevo grupo financiero al que hoy ha decidido adherirse Caja Rural de Canarias se sitúa a la cabeza del sector de las cooperativas de crédito en España con unos activos por importe de 38.000 millones de euros, más de 1.000 oficinas, 5.694 empleados, 2,5 millones de clientes y 795.798 socios.

   Este grupo aglutina una de cada tres oficinas y uno de cada tres empleados del sector de cajas rurales, y está abierto a la participación de más entidades, "por lo que no se descarta que en un futuro puedan incorporarse al mismo otras cajas rurales españolas", según explicó la entidad en un comunicado.

   Caja Rural de Canarias mantendrá su independencia, su sede social y servicios centrales, sus órganos sociales de gobierno y dirección, su red de oficinas y empleados.

   Asimismo, mantendrá "el sentido autonómico de las inversiones y de la aplicación del Fondo Social de Formación y Promoción", según confirmó ella misma.