ALMERÍA.- Los escaladores de Greenpeace han ascendido desde ayer a una de las cuatro grúas situadas en el hotel de El Algarrobico, en Carboneras, para colgar una bola de demolición "simbólica" en su protesta para solicitar el derribo de este hotel "ilegal" y para "recordar a las partes involucradas en el proceso que tienen la obligación de alcanzar un acuerdo para demoler el edificio".
El grupo de activistas está a la espera de que el Gobierno y la Junta de Andalucía alcancen un acuerdo para derribar la construcción, según sus exigencias.
Mientras, los activistas realizan diferentes actividades, como la elaboración de un gran mural en una de las fachadas del edificio para lo que están contando con la colaboración del artista francés 3ttman.
Por otra parte, desde las 20.00 horas de ayer miércoles tuvo lugar una concentración frente al hotel en la que participaron diferentes colectivos ecologistas y sociales, entre los que estaban Ecologistas en Acción y Salvemos Mojácar, con el objetivo de exigir a las administraciones implicadas que procedan a la demolición del hotel.
La concentración había estado precedida por la puesta en marcha de una campaña de recogida de firmas, que se ha saldado por el momento con casi 20.000 apoyos, para pedir la demolición inmediata del hotel y presionar al Gobierno central para que tome una decisión sobre la construcción antes de las elecciones del 20 de noviembre.
El objetivo de la acción era una "denuncia pacífica" es que el Gobierno central y la Junta de Andalucía firmen un acuerdo "que sea rubricado en el Consejo de Ministros próximo en el que se comprometan al inmediato derribo del hotel". Persigue también que la Administración andaluza "se retire de todos los pleitos donde defiende que la parcela de El Algarrobico es urbanizable".
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