miércoles, 24 de febrero de 2010

Añez (PAL) ve "una especie de golpe de estado" la petición de PP e IU de disolver el Ayuntamiento de El Ejido

EL EJIDO.- El concejal de Alcaldía y Coordinación Institucional del Ayuntamiento de El Ejido, José Añez (PAL), celebró hoy el rechazó en la Comisión de Gobernación del Parlamento de Andalucía a la propuesta conjunta en la que PP e IU instaban disolver el Ayuntamiento ejidense y que calificó de "especie de golpe de estado para acceder" al gobierno del municipio "apostando por un camino de dudosa legalidad".

En una nota, Añez aseguró que el voto en contra de los parlamentarios del grupo del PSOE "supone una defensa de la independencia de la política municipal frente al intento" de hacerse "con la Alcaldía a cualquier precio, incluso usando estrategias al margen del juego democrático" al tiempo que recordó que en el seno de la comisión "se habló del futuro de El Ejido al margen de las urnas, única vía democrática para acceder".

A su juicio, lo vivido en el Parlamento autonómico ayer a raíz del encarcelamiento en octubre del alcalde, Juan Enciso, por su presunta implicación en la trama de corrupción municipal destapada por la operación 'Poniente', "fue una especie de golpe de estado, donde dos fuerzas políticas minoritarias y que han demostrado durante años un odio visceral contra los intereses de El Ejido escenificaron su impotencia al no haber podido acceder a través de las urnas al gobierno del municipio".

En esta línea, afirmó que tanto PP e IU han demostrado "un desprecio total a la independencia de la política municipal, apostando por un camino de dudosa legalidad y que vulnera los principios de igualdad entre administraciones públicas".

"En su frustración, --ahonda-- han demostrado de nuevo que los extremos se tocan, y en este caso ha sido como en otras ocasiones cuando partidos del extremo derecho y del extremo izquierdo se han unido para forzar un cambio político".

El edil de Alcaldía y Coordinación Institucional reprochó también que "hayan sido precisamente dos ejidenses los que se han puesto de forma vergonzosa al frente de esta iniciativa que busca entrar por la gatera al gobierno de El Ejido" y lo calificó "de desprecio a la voluntad de los ejidenses ejercida en las urnas".

"Tienen que ser nuestros ciudadanos, y no una decisión externa al municipio, los que decidan en unas elecciones a quién dan su confianza", concluyó.

Los periodistas almerienses han visitado hoy la casa de doña Pakyta y desayunar con ella


ALMERÍA.- Francisca Díaz Torres, de 99 años de edad y conocida familiarmente como 'Doña Pakyta', confirmó hoy que acudirá a ser distinguida por su nombramiento como Hija Predilecta de Andalucía a la ceremonia que tendrá lugar el próximo día 28, Día de Andalucía, en el Teatro de la Maestranza de Sevilla en un acto presidido por el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán.

Durante un desayuno con los medios de comunicación en su casa, ubicada en la plaza Emilio Pérez en la ciudad de Almería, Francisca Díaz mostró su vivienda a los medios de comunicación y anunció que la donará una vez que fallezca al Ayuntamiento de Almería para que en ella se realice un museo para los almerienses, un "secreto a voces", según ella, que confirmó una de sus sobrinas-nieta.

De esta forma, uno de los sobrinos y presidente del Grupo Playas y Cortijos, del que es presidenta honorífica homenajeada, César Torres, consideró la distinción otorgada por el Gobierno andaluz como una "ratificación al final de su vida de un andalucismo que trasciende".

Así, Francisca Torres mostró su hogar a los medios de comunicación, un caserío diseñado por el arquitecto Guillermo Langle que ocupó la Hija Predilecta de Andalucía a la edad de 21 años una vez se casó con José Gómez Montoya, quien rehabilitó el inmueble tras la Guerra Civil.

'Doña Pakyta' se ha dedicado conjuntamente con su marido hasta 1976, año en que éste perece, a cuidar de la finca 'El Romeral' así como del resto de terrenos que posee y que alcanzan 3.300 hectáreas en el Parque Natural de Cabo de Gata a proteger el medio ambiente de la zona, un compromiso que afianzó mediante una empresa de gestión sostenible.

Blanco y Zapatero / José María Carrascal

Ha causado sorpresa el ascenso de José Blanco en el escalafón ministerial, donde, tras desplazar a la vicepresidenta primera, según unos, ocupa ya la posición de valido, según otros. Se quedan cortos. José Blanco no es una invención de Zapatero. Zapatero es la invención de José Blanco.

No pueden darse dos personalidades más distintas, física, humana e intelectualmente. Zapatero es un señorito de Valladolid que se buscó un pedigrí republicano-obrero en León para lograr un escaño socialista en el Congreso, donde iba a eternizarse, hasta que Blanco lo descubrió y convirtió en príncipe de las Españas.

A diferencia de Zapatero, a Pepe Blanco nada le ha sido regalado en la vida. Nacido en el corazón de la Galicia rural, tierra de políticos, dejó los estudios de Derecho para hacer carrera en el PSOE desde el último peldaño, e irlos subiendo uno a uno hasta la Secretaría General. Nadie conoce mejor su partido que él; puede que Alfonso Guerra, pero Guerra es ya historia. Mientras Blanco es el presente.

Un «apparatchik» en el más estricto sentido de la palabra, ha hecho favores a todos y todos se los deben. Sin él, que muñó la coalición entre descontentos con el viejo aparato y guerristas, Zapatero nunca hubiera sido candidato a la presidencia en 2004. Aunque también es verdad que sin el 11-M, tampoco Zapatero hubiera ganado las elecciones. Pero la suerte es de quien la busca, y Pepe Blanco sabe buscarla como pocos.

De su maestría en el manejo de tiempos, personas y lugares habla que no quisiera ocupar un cargo de relumbrón en la primera legislatura de Zapatero, contentándose con seguir al frente del partido. Su aparición en la segunda, como ministro de Fomento, desde donde se distribuyen las mercedes, y, ahora, como «primer ministro» en la sombra, advierte de la emergencia que vislumbra, a la que intenta atajar.

Su principal problema no es el PP, paralizado por sus luchas internas, ni siquiera la crisis, con ser gravísima. Es su criatura, que ha empezado a actuar por su cuenta y riesgo, y en vez de seguir las pautas cautelosas de su creador, da bandazos, como esos muñecos a los que se les ha saltado la cuerda y tanto van en un sentido como en otro, contradiciéndose cada día, alarmando a los mercados, espantando a los suyos y dando munición a los rivales.

Al frente de ese gabinete de crisis que es la comisión triministerial, José Blanco va a tratar de que los sindicatos no se desmanden, los inversores no huyan, los banqueros obedezcan y el PP siga siendo la casa de tócame Roque o como te llames. Pero su tarea más urgente es controlar a su pupilo, que ha terminado creyéndose un estadista capaz de solucionar los problemas seculares de España, aliar las más enfrentadas civilizaciones y resolver las mayores crisis, cuando es la simple creación de un chico listo de Palas de Rey.

http://www.abc.es/20100224/opinion-firmas/blanco-zapatero-20100224.html